Nunca me abandones
Una novela de Kazuo Ishiguro, japones migrado a Inglaterra en sus primeros años de vida, con una madurez novelística que se hace presente en dicho título, a pesar de ser la primera que éste escribe.
Aborda un tema surrealista, pero que tiene sus tintes de realidad, acerca de la vileza del ser humano, otros la llaman distopía. A través de unos ojos ingenuos y castrados de toda crítica hacia su destino, es narrado cada uno de los hechos que marcaron la vida de Kathy, así como a sus amigos cercanos y las etapas que fueron acompañando su madurez. Problemas, amorios, emociones, circunstancias adversas y por fin las donaciones son tratadas con toda normalidad, con una ausencia de calidez aunque la vida les va en eso.
La historia versa sobre el como eran conseguidas las refacciones para personas normales a fines de la segunda guerra mundial, hasta finales de los 50's, en granjas especialmente hechas para clones, los cuales llevaban en camadas hasta el punto en que iniciaban el proceso de donación. El proceso era en fases, hasta que el alumno completaba sus donaciones (moría en el acto y era desmantelado como cual coche viejo). Los clones eran educados con calidad superior que el resto de los humanos, no por azares del destino, sino según la versión de la directora para demostrar al mundo que esos seres, esos clones, los alumnos pues; tenían alma. La sociedad evitaba pensar, por evidentes razones, el provenir de los órganos, tratando de justificar de la forma que fuera, antes de decir que eran tan humanos como ellos.
Puede haber muchas similitudes con el manejo de información de la sociedades actuales, quizá todos tenemos un poco de "alumnos de Hailsham", a medida que creemos en otras personas con fe ciega y somos incapaces de contradecir el destino que nos han deparado. Somos simplemente artilugios fabricados a partir de ideologías escogidas para nosotros.
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